El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.
8:8E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.
8:9 Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
8:10 Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?
8:11 Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.
Sin embargo esto no es Palestina en el Siglo I, y aquí además de ser la pedofília pecado, también es delito.
Así que, siguiendo las indicaciones del Santo Padre, hasta más ver, que voy a empezar a hacer puntería cerca de los campanarios.
Esperadme compañeros, que ya llego:
A Sueldo de Moscú
3 comentarios:
menuda montaña de piedras vamos a juntar!!
"Contrimás" mejor.
jaja, esto en mi tierra, se llama estar a "morrillazo limpio"
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